• Saboreó el jugo hasta el paroxismo clitoriano.
  • Se fusionaron placenteramente.
  • Las caricias le hicieron verterse en la femínea piel.
  • La oscuridad fue penetrada hasta humedecerse.
  • La dureza y la fragilidad se encontraron en el goce.
  • El masculino efluvio se derramaba por la cálida garganta.
  • Llena de masculinidad disfrutó con ambos.